El consumo de moda en España cae un 5 % hasta septiembre a pesar de la resiliencia en el tercer trimestre

El consumo de moda en España cerró el tercer trimestre con un descenso acumulado del 5 % hasta septiembre. Según el informe de consumo de moda elaborado por el Clúster Catalán de la Moda (Modacc) y Worldpanel by Numerator, el sector registró una evolución más estable respecto a la reportada en primavera, tras un primer semestre también a la baja, periodo en el que la facturación de este segmento retrocedió un 5,5 % en el país. Aunque las caídas siguen siendo generalizadas, el nuevo informe identifica signos de resiliencia en varias categorías del mercado durante el tercer trimestre.

“El incremento de los costes de la vivienda y de la alimentación, junto con la falta de confianza y el cambio en las prioridades de las personas consumidoras, está condicionando el gasto destinado a la moda, que se sitúa por debajo de los niveles de años anteriores”, ha explicado el director del clúster, David García. No obstante, el responsable afirma que “ante este contexto, el sector está desplegando diversas iniciativas para reactivar el interés durante el tramo final del año, y seguro que encontraremos opciones muy interesantes para todo el mundo en el mercado”.

El estudio, elaborado de forma trimestral, analiza las compras reales de más de 10 000 consumidores mayores de 15 años residentes en la península y Baleares, teniendo en cuenta todos los canales de compra y seis categorías clave: punto exterior de mujer, moda íntima de mujer, baño, calcetería, moda íntima de hombre e infantil. Su principal objetivo es proporcionar información fiable para que las empresas puedan tomar decisiones estratégicas y anticiparse a la evolución del mercado.

Entre las categorías analizadas, el punto exterior de mujer se posiciona como el segmento más sólido del trimestre y el único que mantiene tanto el volumen como el valor. Además, es la categoría que mejor resiste la caída acumulada del año, con un descenso de tan solo el 1,2 % en valor. Por otro lado, la ropa interior femenina y la moda infantil registran las caídas más profundas, aunque esta última modera su descenso frente a la media del mercado. La categoría de baño, por su parte, retrocede con fuerza tras los resultados positivos registrados en el verano de 2024, mientras que la calcetería y la moda íntima masculina limitan su pérdida de valor gracias a un consumo más estable, pese a vender menos unidades.